Lionel Messi y Cristiano Ronaldo se enfrentaron en una subasta histórica en 2016, pero esta vez no fue en el campo de fútbol, sino en la puja por un rarísimo Ferrari 335 S Spider Scaglietti, uno de los autos más exclusivos del mundo, del cual solo existen cuatro unidades. La subasta se llevó a cabo en París durante el evento Retromobile, y ambos jugadores estaban determinados a hacerse con este icónico vehículo de carreras.
Finalmente, Messi logró superar a Ronaldo con una oferta descomunal de 36 millones de dólares. “Fue una inversión importante, pero siempre me han apasionado los autos únicos y este Ferrari es verdaderamente especial”, reveló Messi en una reciente entrevista.
El astro argentino compartió en su cuenta de Instagram una imagen irónica tras su victoria en la subasta, sosteniendo un pequeño Ferrari de juguete de la película Cars, con la leyenda: “Mi nuevo coche”. Aunque el desembolso de 36 millones pueda parecer excesivo para muchos, esta compra no hizo una gran mella en las finanzas de Messi, quien ha sido uno de los deportistas mejor pagados del mundo durante años.
El Ferrari 335 S Spider Scaglietti es un coche legendario, construido entre 1957 y 1958, con un motor V12 de 400 caballos de fuerza que alcanzaba una velocidad máxima de 186 mph, superando a muchos de sus contemporáneos en las prestigiosas carreras como la Mille Miglia y las 24 Horas de Le Mans.
Para Messi, sumar este automóvil con tanta historia a su colección de superdeportivos fue un verdadero orgullo, y aseguró: “Coleccionar autos como este es una de mis grandes pasiones”. Este Ferrari ahora tiene un lugar especial en su colección, que incluso incluye un elevador para superautos en su penthouse en Miami.