La FIFA finalmente se ha pronunciado sobre el polémico incidente ocurrido durante el partido entre Argentina y Paraguay en las eliminatorias para el Mundial, en el que Lionel Messi fue el blanco de agresiones por parte de los aficionados paraguayos. Esto ocurrió tras una noche tensa en el Estadio Defensores del Chaco, marcada por la derrota 2-1 de Argentina, que vio a Messi recibir faltas constantes, enfrentarse al árbitro Anderson Daronco y ser atacado con botellas por la afición local.
El defensor paraguayo Omar Alderete, autor de uno de los goles que sellaron la victoria de su equipo, tomó la iniciativa de disculparse públicamente con el capitán argentino. En un mensaje en Instagram, Alderete expresó:“Querido Leo Messi, quiero disculparme en nombre de mi país por el lamentable incidente en el que alguien te arrojó una botella. Eres un ídolo para millones aquí y en todo el mundo (especialmente para Fede). Lamentamos profundamente este acto irrespetuoso que no representa el cariño y admiración que sentimos por ti.”
En respuesta al incidente, la FIFA emitió un comunicado en el que condena el comportamiento antideportivo y señala que tomará medidas disciplinarias. Según el organismo rector del fútbol mundial:“La FIFA no tolerará actos de violencia ni faltas de respeto hacia los jugadores. Estamos investigando lo sucedido en el partido entre Paraguay y Argentina para garantizar que se adopten las medidas necesarias y se eviten incidentes similares en el futuro.”
Por otro lado, respecto al enfrentamiento verbal entre Messi y el árbitro, en el que el argentino llamó “cobarde” a Daronco, la FIFA indicó que no planea sancionar al jugador. Según la entidad, Messi no incurrió en acciones graves que ameriten una suspensión, aunque subrayaron la importancia de mantener el respeto en el campo.
Lionel Messi, quien mantuvo la calma frente a la situación, ahora se prepara junto a la selección argentina para su próximo encuentro contra Perú, programado para el 19 de noviembre. Este será un duelo crucial para La Albiceleste, que busca romper su racha de tres partidos consecutivos sin ganar en las eliminatorias.
La disculpa de Alderete y la postura de la FIFA han generado un debate en la comunidad futbolística sobre la seguridad de los jugadores y la necesidad de un entorno más respetuoso en los estadios.