Jean-Claude Van Damme, conocido por su carisma y habilidades en artes marciales, ha revelado aspectos sorprendentes de su vida personal y profesional.
A pesar de su imagen de hombre fuerte, Van Damme enfrentó una vida llena de altibajos, desde sus humildes comienzos en Bruselas hasta su ascenso en Hollywood.
A los 10 años, comenzó su entrenamiento en karate, y a los 16 años tomó clases de ballet, lo que mejoró su equilibrio y flexibilidad, habilidades cruciales para sus acrobacias en pantalla.
Van Damme luchó contra adicciones a las drogas y problemas legales en los años 90, lo que afectó su carrera y vida personal, incluyendo varios matrimonios tumultuosos.
Tras ser diagnosticado con trastorno bipolar, Van Damme encontró un camino hacia la recuperación y un regreso triunfal a la actuación, participando en producciones exitosas como “The Expendables 2”.
Su historia de perseverancia y redención ha sido reconocida con estatuas en su honor en su ciudad natal y en Azerbaiyán, destacando su impacto en la cultura popular.