Salvador Cabañas, exfutbolista paraguayo y figura destacada del Club América, ha vuelto a ser el centro de atención tras revelarse impactantes detalles sobre su vida después del atentado que lo dejó al borde de la muerte en 2010. Cabañas, quien fue víctima de un disparo a quemarropa en un bar de la Ciudad de México, enfrentó no solo las secuelas físicas de su grave lesión, sino también una traición desgarradora por parte de quienes más amaba.
Desde sus inicios en el fútbol, Cabañas demostró un talento excepcional que lo llevó a convertirse en uno de los máximos goleadores de su equipo. Sin embargo, la tragedia llegó de manera inesperada cuando, tras un altercado con un narcotraficante, recibió un disparo que cambió su vida para siempre. A pesar de las críticas y las adversidades, su espíritu de lucha lo llevó a sobrevivir a este ataque, aunque la recuperación fue un proceso arduo y lleno de desafíos.
Mientras Cabañas luchaba por su vida en el hospital, su esposa, María Lorgia, comenzó a desviar su fortuna, vaciando cuentas y vendiendo propiedades sin su consentimiento. Esta traición profundizó el dolor del exfutbolista, quien no solo perdió su carrera, sino también la confianza en la persona que supuestamente lo apoyaba. Tras despertar del coma, Cabañas tuvo que reconstruir su vida desde cero, enfrentando una batalla legal para recuperar lo que le pertenecía.
A pesar de las adversidades, Cabañas ha encontrado un nuevo propósito. Lejos de la fama y los lujos, ha abierto una panadería junto a sus padres y se dedica a impartir clínicas de fútbol a jóvenes. Su historia de resiliencia ha inspirado a muchos, y aunque su vida no es la misma, sigue adelante con esperanza y determinación.
Cabañas ha tenido la oportunidad de reconciliarse con su pasado. En 2023, visitó el Club América, donde fue recibido con admiración. A sus 44 años, ha aprendido a valorar lo simple y ha optado por el camino del perdón hacia su agresor. Su historia es un recordatorio de que, sin importar cuán dura sea la caída, siempre hay una oportunidad para levantarse y seguir adelante.