En un movimiento impactante que ha sacudido los cimientos de la familia real británica, el Rey Carlos III ha decidido distanciarse de su esposa, Camila, en un intento por proteger a los hijos de la Princesa Catalina. Las tensiones han alcanzado un punto crítico, y los rumores sobre las intenciones de Camila están causando un revuelo en el Palacio.