En un giro alarmante de los acontecimientos, el ex presidente Donald Trump ha desatado una ola de intimidación que pone en jaque la independencia judicial y la libertad de prensa en Estados Unidos. La reciente detención de la jueza María Dugan en Wisconsin, acusada de obstrucción de la justicia sin pruebas contundentes, marca un claro mensaje: desafiar a Trump puede tener consecuencias devastadoras.