En un giro sorprendente que pone en jaque a miles de vidas, la Corte Suprema ha decidido otorgar un respiro a Donald Trump, bloqueando temporalmente una orden judicial que exigía el desembolso de 2000 millones de dólares en ayuda humanitaria. La decisión, emitida por el juez presidente John Roberts, plantea interrogantes inquietantes sobre el juego político que se desarrolla en Washington, donde la vida de personas vulnerables se convierte en moneda de cambio.