Un impactante video ha desatado la indignación en Brasil al mostrar la brutal agresión de Igor Eduardo Pereira contra su pareja, Juliana García dos Santos, en un ascensor. En solo 36 segundos, Igor propinó 61 puñetazos a Juliana, quien se encontraba atrapada y suplicando por su vida. Las imágenes, que se han viralizado rápidamente, revelan la cruda realidad de la violencia de género y han generado una ola de protestas en todo el país.

El ataque ocurrió el 26 de julio de 2025, cuando la pareja discutía por celos. A pesar de las advertencias de amigos y familiares sobre el comportamiento violento de Igor, Juliana creía que podía cambiarlo. Sin embargo, ese día, la situación escaló a niveles inimaginables. Mientras el ascensor descendía, Igor no mostró piedad y continuó golpeándola, dejando a Juliana con múltiples fracturas en el rostro y un edema facial severo.

Las autoridades llegaron 10 minutos después del ataque, y Juliana fue trasladada al hospital, donde se le realizó una cirugía reconstructiva. La brutalidad del ataque ha llevado a movimientos sociales a exigir justicia y penas más severas para Igor, quien ha sido acusado formalmente de tentativa de feminicidio. A pesar de su aparente tranquilidad durante el arresto, su defensa ha intentado justificar su conducta alegando problemas de salud mental y consumo de sustancias.

Mientras tanto, Juliana ha declarado que su historia representa a millones de mujeres que sufren violencia. A pesar de las secuelas físicas y emocionales, se muestra decidida a luchar y dar voz a quienes no tuvieron la oportunidad de sobrevivir. La conmoción que ha causado este caso no solo ha resonado en Brasil, sino que ha cruzado fronteras, convirtiéndose en un símbolo de resistencia y una llamada a la acción contra la violencia de género. La sociedad observa atentamente el desarrollo de este caso, esperando que se haga justicia y que Igor enfrente la máxima condena.