Laura Bozzo ha desatado una fuerte controversia tras sus declaraciones en vivo sobre el hijo de Camilo Sesto, a quien calificó de “enfermo mental” y sugirió que necesita ser internado urgentemente. Durante su programa, Bozzo afirmó que el comportamiento del heredero del icónico cantante está deteriorando su legado, lo que generó una ola de indignación en redes sociales. “Camilo Sesto fue un artista de nivel mundial y su hijo está destruyendo todo lo que él construyó”, expresó con contundencia.
La reacción en línea fue inmediata. Mientras algunos usuarios apoyaron a Bozzo, argumentando que estaba exponiendo una realidad que muchos prefieren ignorar, otros la acusaron de falta de empatía y de aprovecharse de la situación delicada del joven para generar polémica. La madre del hijo de Camilo Sesto respondió visiblemente molesta, defendiendo a su hijo y pidiendo apoyo en lugar de ataques.
Fuentes cercanas a la producción del programa indicaron que Bozzo fue aún más dura en privado, reiterando que la vida del joven es una vergüenza para su padre. A pesar de las críticas, Bozzo se mantuvo firme en su postura y lanzó un mensaje desafiante en redes sociales, afirmando que no tiene miedo a las repercusiones de sus palabras.
El escándalo se intensificó con la filtración de un video del hijo de Camilo Sesto en un estado preocupante, lo que avivó el debate sobre la responsabilidad de los medios al tratar temas de salud mental. Mientras algunos consideraron que el video confirmaba la necesidad de ayuda, otros lo vieron como una invasión a su privacidad.
Laura Bozzo continúa defendiendo su postura, mientras la familia de Camilo Sesto busca proteger su privacidad en medio de la creciente presión mediática. Este conflicto ha abierto un debate sobre los límites de la crítica en situaciones delicadas y pone en evidencia las complejidades de manejar el bienestar de una persona en crisis pública. La controversia sigue generando reacciones y preguntas sobre el papel de los medios en la salud mental y el apoyo familiar.