La decisión ha generado una tormenta mediática. Ni sus siete hijos, ni sus hermanos, ni siquiera su madre fueron mencionados en el documento que estipula que su patrimonio, incluyendo derechos de autor y bienes inmuebles, queda en manos de una mujer con la que no llegó a casarse. Las redes sociales se han inundado de comentarios de apoyo y condena. “Papá nos dejó el apellido, pero también nos dejó solos”, escribió uno de sus hijos, desolado por la decisión.