**Título: Crisis Diplomática en Estambul: Rusia Deserta la Cumbre y Trump Deja la Puerta Abierta**

En un giro inesperado que agita aún más el ya convulso escenario internacional, Rusia ha decidido no enviar a su ministro de Exteriores, Sergei Lavrov, a las negociaciones de paz programadas en Estambul, marcando un portazo a las esperanzas de diálogo con Ucrania. Esta decisión se produce a un día de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, haya expresado su disposición a participar en las conversaciones, pero con una condición: la presencia de Vladimir Putin.

Mientras la tensión se intensifica, Donald Trump ha dejado entrever que podría alterar su agenda para unirse a la cumbre. A bordo del Air Force One, el ex presidente de Estados Unidos insinuó que su participación podría ser crucial para alcanzar la paz, abriendo un abanico de posibilidades en un conflicto que parece no tener fin. “Si hay una oportunidad para poner fin a la guerra, estoy listo para ayudar”, afirmó, dejando a todos expectantes.

La atmósfera en Estambul se complica aún más con las declaraciones de líderes europeos como Emmanuel Macron, quien ha indicado que no puede aumentar la ayuda a Ucrania en este momento, y el canciller alemán Fred Merz, quien subraya la necesidad de fortalecer el ejército alemán. Las dinámicas de poder en la región están cambiando, y la falta de una invitación a Zelenski por parte de la OTAN ha generado escepticismo sobre el futuro de las negociaciones.

Con un trasfondo de enfrentamientos militares, donde Rusia ha continuado su ofensiva con drones sobre territorio ucraniano, el mundo observa con atención. La incertidumbre es palpable y el futuro de la diplomacia global se juega en Estambul, donde cada palabra y decisión cuenta. La expectación es alta, y todos esperan que esta cumbre marque un verdadero cambio en la búsqueda de la paz.