En un giro dramático de los acontecimientos, Irán ha desatado una ofensiva sin precedentes al lanzar misiles contra un centro del Mossad en Tel Aviv, intensificando así el conflicto ya explosivo con Israel. Esta escalada de violencia llega en un momento crítico, mientras Estados Unidos, bajo la dirección de Donald Trump, se niega a entablar negociaciones con Teherán y advierte sobre posibles represalias devastadoras.