**Trump vuelve al ataque mientras Europa enfrenta la incertidumbre y Putin habla con Macron**
En un giro impactante de los acontecimientos, Donald Trump ha reavivado la tensión comercial al cumplir con el plazo del 9 de julio para reanudar aranceles más altos, desatando una nueva ola de incertidumbre en los mercados. A las 8 de la mañana, Trump dejó claro que las negociaciones con Japón son más complicadas de lo esperado, y los mercados, ya nerviosos, reaccionaron con un descenso inicial. La inquietud se intensifica mientras se espera un posible aumento de aranceles del 10% en Europa, lo que podría afectar gravemente la economía global.
Mientras tanto, el clima geopolítico se complica aún más. En Gaza, Trump anunció un alto al fuego de 60 días, pero advirtió que la situación podría deteriorarse si Hamas no acepta las condiciones. En el frente europeo, la fortaleza del euro se convierte en un arma de doble filo, ya que podría obstaculizar la recuperación económica justo cuando Europa comenzaba a vislumbrar la luz al final del túnel.
En un contexto de creciente presión, la Reserva Federal se encuentra en una encrucijada. Powell ha insinuado que la posibilidad de una reducción de tipos en julio no está descartada, lo que podría aliviar la carga económica, pero también podría intensificar la inflación, un riesgo que Trump ha señalado repetidamente.
Por si fuera poco, la conversación entre Macron y Putin marca un nuevo capítulo en las tensiones en Ucrania. Con rumores de que Estados Unidos podría suspender el envío de armas a Ucrania, la preocupación por el agotamiento de las reservas se cierne sobre la Casa Blanca. La inestabilidad en el Este de Europa y la amenaza de una ofensiva rusa en Sumi añaden otra capa de urgencia a la situación.
La combinación de estos factores crea un caldo de cultivo explosivo que podría cambiar el rumbo de la economía global y la política internacional. La atención está centrada en cómo responderán los mercados y los líderes mundiales a esta crisis en evolución.