**Título: Trump recibe un duro golpe de China, Rusia habla de las tierras raras y Europa alerta**
En un giro explosivo de los acontecimientos, la guerra comercial entre Estados Unidos y China se intensifica drásticamente. Este martes, Pekín ha lanzado una contraofensiva contundente tras la imposición de aranceles del 10% por parte de la administración Trump. China no solo ha iniciado una investigación sobre Google por supuestas violaciones antimonopolio, sino que también ha anunciado nuevos gravámenes del 15% sobre el carbón y el gas natural, así como del 10% sobre el petróleo y equipos agrícolas estadounidenses. La embajada china en Washington ha calificado estas medidas como “totalmente justas y razonables”, desafiando abiertamente a la administración Trump.
Mientras tanto, la tensión se extiende hacia Europa, donde Ursula von der Leyen ha advertido sobre posibles sanciones adicionales de Estados Unidos. Europa se prepara para un escenario de “geopolítica hipercompetitiva”, y los líderes europeos están en alerta máxima ante las amenazas de Trump, quien ha dejado claro que busca renegociar acuerdos comerciales.
En un desarrollo paralelo, Trump ha condicionado el apoyo a Ucrania a un acceso preferencial a sus minerales de tierras raras, lo que ha provocado la furia de Moscú. Rusia ha respondido con contundencia, sugiriendo que la propuesta de Trump es un intento de “comprar” la ayuda estadounidense. La situación en Ucrania se complica aún más con cortes de electricidad en varias regiones debido a los ataques rusos, lo que añade un nuevo nivel de urgencia a la crisis.
En medio de este caos, la economía estadounidense comienza a dar señales de alarma. Encuestas recientes muestran que una mayoría de los votantes se opone a las políticas arancelarias de Trump, temiendo que estas medidas puedan dañar la economía. La presión sobre la Casa Blanca aumenta, y el tiempo corre mientras el mundo observa cómo se desarrollan estos eventos sin precedentes.