**El Decreto que Usa ANSES para Decirte NO ❌🚫**
¡Urgente! Un decreto oscuro está afectando a miles de argentinos que intentan acceder a sus jubilaciones y pensiones. El Decreto 460, utilizado por ANSES, ha sido denunciado por rechazar sistemáticamente solicitudes de pensiones y retiros por invalidez, incluso en casos donde la justicia ha declarado su inconstitucionalidad. Este decreto establece criterios restrictivos que dejan a muchos aportantes regulares e irregulares fuera del sistema, generando un caos en la vida de quienes han contribuido durante años.
La normativa exige que los aportes sean verificados en períodos específicos, lo que ha llevado a que personas con 20 años de aportes terminen en el sistema no contributivo. Esto es una contradicción alarmante: mientras algunos obtienen jubilaciones con cero aportes, otros, que han trabajado toda su vida, son despojados de sus derechos. La situación se vuelve aún más crítica cuando se considera que muchos solicitantes llegan a ANSES después de sufrir graves incapacidades o pérdidas familiares, solo para ser rechazados.
Casos desgarradores han llegado a los tribunales, donde la Corte Suprema ha intervenido en varias ocasiones, pero el proceso es lento y angustiante. La falta de diagnóstico rápido en patologías como la esquizofrenia ha llevado a que personas permanezcan años sin poder trabajar, y cuando finalmente buscan ayuda, ya no cumplen con los requisitos para ser considerados aportantes regulares.
La justicia ha señalado que la relación de aportes debe ser evaluada desde el momento de la incapacidad, no desde la solicitud. Sin embargo, muchos se encuentran atrapados en un laberinto burocrático que los deja sin opciones. La desesperación es palpable: familias enteras luchan por obtener lo que les corresponde, enfrentando un sistema que parece diseñado para negarles sus derechos.
Es fundamental que quienes se enfrenten a esta situación busquen asesoría legal. La posibilidad de judicializar el caso existe, y con antecedentes favorables, hay esperanza de que la justicia prevalezca. La lucha por los derechos de los aportantes no termina aquí. ¡Es hora de alzar la voz y exigir un cambio!