¡SE PUDRIÓ! La periodista Viviana Canosa desató una tormenta mediática al arremeter contra colegas “ensobrados” del nuevo gobierno de Javier Milei, lanzando una serie de acusaciones incendiarias que han dejado a la prensa en shock. En una entrevista explosiva, Canosa no se contuvo y calificó a algunos de sus pares de “pelotud*s”, señalando que la libertad de expresión está en peligro y que muchos periodistas se han alineado con el poder en lugar de servir al pueblo.

La tensión en el aire era palpable mientras Canosa criticaba a aquellos que pretenden ser defensores de la democracia, pero que, según ella, han traicionado su deber. “La prensa tiene que trabajar para los gobernados y no para los gobernantes”, declaró, dejando claro que no tiene miedo de enfrentar a quienes considera cómplices del sistema. Su fuerte discurso resuena en un momento crítico, donde la independencia periodística se encuentra en la cuerda floja.

Canosa también se refirió a su propia experiencia, revelando que su compromiso con la verdad le ha costado su trabajo, pero que prefiere la honestidad a “tranquilos” con el poder. “No es un chiste quedarte sin laburo”, enfatizó, mientras desnudaba la hipocresía de algunos periodistas que se presentan como moralmente superiores.

La situación se intensifica con su crítica a la relación de algunos colegas con el presidente, sugiriendo que han cruzado líneas éticas al asistir a eventos privados con él. En un momento de furia, Canosa se rió de las acusaciones sobre su vida personal, desviando la atención hacia lo que ella considera la verdadera noticia: un presidente que, según ella, no es digno de su cargo.

La comunidad periodística está en alerta máxima tras estas declaraciones explosivas. ¿Marcará este el inicio de una nueva era de confrontación en los medios de comunicación argentinos? La respuesta está en el aire, y la atención del país está fija en lo que sucederá a continuación.