**¡RAPTADA EN VIDEO por el CARTEL! 4 SECUESTROS, Denunció al NARC0 y lo ASESINAR0N**

En un giro desgarrador de los acontecimientos, el activista y empresario Gabriel Hernández fue encontrado muerto en Reynosa, Tamaulipas, tras haber sido víctima de múltiples secuestros y amenazas por parte del cártel del Golfo. Su cuerpo fue hallado en un canal de aguas residuales, con al menos cuatro impactos de bala, un trágico desenlace que evidencia la brutalidad del narcotráfico en México.

Hernández, quien había denunciado repetidamente las atrocidades del crimen organizado, fue secuestrado por cuarta vez el 16 de julio mientras esperaba a su esposa en un auto. A pesar de contar con medidas de protección, su custodia había sido retirada días antes sin explicación, dejándolo vulnerable ante un grupo armado que lo persiguió y ejecutó. Durante su cautiverio, fue testigo de horribles crímenes, incluyendo asesinatos y torturas, convirtiéndose en una voz valiente en la lucha por los derechos humanos.

Este asesinato no es un caso aislado. Apenas días después, la maestra jubilada Irma Hernández Cruz fue secuestrada y asesinada en Veracruz por negarse a pagar extorsiones. Un video perturbador la muestra sometida por hombres armados, advirtiendo a otros taxistas sobre la mafia veracruzana. Su cuerpo fue encontrado semanas después, evidenciando la falta de protección y la impunidad que enfrentan quienes desafían al crimen organizado.

La indignación crece entre grupos de derechos humanos, que exigen respuestas del gobierno de Tamaulipas y Veracruz. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha prometido investigar ambos casos, pero la desconfianza persiste. La comunidad de defensores y familiares de desaparecidos clama por una revisión urgente de los mecanismos de protección, cuestionando la efectividad de las autoridades ante la violencia que enfrentan día a día.

La muerte de Gabriel e Irma resuena como un grito de alerta. La lucha contra el narcotráfico y la extorsión continúa, dejando a un país entero en la cuerda floja, donde la justicia parece ser un lujo inalcanzable.