¡URGENTE! El presidente Javier Milei ha tomado una drástica decisión tras descubrir un escándalo de fraude en el examen de residencias médicas, donde 109 extranjeros habrían copiado. En un contexto donde la salud pública está en juego, el gobierno ha decidido deportar a estos individuos que intentaron engañar al sistema.

La situación se desató cuando las autoridades detectaron un patrón alarmante: varios aspirantes extranjeros obtuvieron puntajes extraordinarios en la primera prueba, pero al ser sometidos a un nuevo examen, sus calificaciones cayeron drásticamente. Por ejemplo, un postulante que inicialmente había sacado 88 puntos, apenas alcanzó 28 en la segunda ronda. Este fraude pone en riesgo la vida de pacientes argentinos que podrían ser atendidos por médicos no calificados.

El gobierno ha anunciado que cruzará datos migratorios para identificar a aquellos que mintieron sobre el propósito de su ingreso al país. La medida es contundente: no se necesita un juicio formal para deportar a quienes hayan incurrido en esta infracción. La salud de la población es la prioridad, y Milei ha dejado claro que no tolerará a quienes amenacen la seguridad sanitaria.

Este escándalo ha generado reacciones intensas, y algunos grupos han acusado al gobierno de ser xenófobo. Sin embargo, la administración sostiene que este no es un asunto de nacionalidad, sino de competencia y ética profesional. La preocupación radica en que personas no capacitadas pudieran estar operando en hospitales, poniendo en riesgo vidas.

Milei se ha comprometido a asegurar que solo aquellos verdaderamente calificados puedan ejercer en el sistema de salud argentino. La situación es crítica y el país está en alerta máxima mientras se avanza en la depuración de estos casos. ¡La salud de todos está en juego y el tiempo apremia!