“Mujer Bonita 2: Una Segunda Oportunidad” retoma la historia décadas después de la original, reuniendo a Vivian Ward (Julia Roberts) y Edward Lewis (Richard Gere) en una historia que explora las complejidades del amor, las segundas oportunidades y el crecimiento personal. La película comienza con Vivian, ahora una exitosa empresaria, dirigiendo una fundación para mujeres desfavorecidas en Los Ángeles. Edward, tras retirarse de su prestigiosa carrera empresarial, lleva una vida más tranquila, pero siente un vacío que solo Vivian llenó.
Ambos llevan años separados; su relación terminó de forma amistosa pero dolorosa debido a las presiones de sus carreras y sus caminos vitales divergentes. El destino los reencuentra cuando Edward busca la ayuda de Vivian para organizar una gala benéfica de alto perfil. Mientras trabajan codo con codo, resurgen viejos sentimientos, pero también las heridas e inseguridades que una vez los separaron. La película profundiza en sus dificultades para confiar, el miedo a repetir errores del pasado y el reto de reconciliar sus vidas independientes con la posibilidad de un romance renovado.
Los personajes secundarios, incluyendo una peculiar mejor amiga y una nueva socia, aportan humor y una dinámica fresca, pero el núcleo de la película sigue siendo la relación en desarrollo entre Vivian y Edward. La historia llega a su clímax en la gala benéfica, donde una crisis obliga a ambos a confrontar sus verdaderos sentimientos. En un emotivo discurso, Edward admite que nunca dejó de amar a Vivian, y ella revela que su éxito se inspiró en la confianza que una vez él le infundió. La película termina con la pareja decidiendo darle una segunda oportunidad a su amor, esta vez como iguales, listos para afrontar el futuro juntos.