El 2024 empezó con la noticia devastadora que sacudió a sus seguidores: su salud estaba en riesgo, y su vida personal también sufrió un giro inesperado. La separación de su pareja, Irina Baeva, fue solo el inicio de una tormenta emocional. Mientras él lidiaba con su diagnóstico, se desvanecieron las sonrisas y el glamour; la realidad era otra. Gabriel compartió que pasó por múltiples hospitalizaciones, lidiando con síntomas como fatiga extrema y moretones inexplicables. “Mi salud se ha convertido en mi única prioridad”, confesó, visiblemente afectado.